Trujillo, 30 de octubre de 2025.- Keiko Fujimori oficializó este miércoles su candidatura presidencial para las elecciones generales de 2026 en el local “Villa Gabuko”, en Huanchaco. Su llegada al aeropuerto Capitán…
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Keiko Fujimori lanza cuarta candidatura haciendo uso indebido de recursos estatales de Perú
El 30 de octubre de 2025, Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, anunció su cuarta candidatura presidencial para las elecciones de 2026 durante el «Gran Encuentro Fujimorista». Acompañada por Luis Galarreta y Miki Torres como precandidatos a las vicepresidencias, Fujimori prometió combatir la inseguridad y el crimen organizado, evocando un discurso populista que recuerda sus campañas de 2011, 2016 y 2021. Sin embargo, el evento se vio opacado por la detección de una cámara del Congreso de la República (código 25459) utilizada para grabar y transmitir el mitin, un acto que viola el Reglamento Interno del Congreso y la Ley N.° 27815, reavivando críticas sobre el uso de recursos estatales para fines proselitistas, una práctica recurrente asociada al clientelismo fujimorista.
El responsable directo, Daniel Constantino Luza Amesquita, técnico de la Oficina de Participación Ciudadana y aportante de Fuerza Popular, renunció el 1 de noviembre tras la apertura de un procedimiento administrativo sancionador por el Congreso, iniciado el 31 de octubre. La investigación, que podría derivar en cargos por peculado de uso (pena de 2 a 4 años), también apunta a posibles responsabilidades de supervisores, incluida la Primera Vicepresidencia a cargo del fujimorista Fernando Rospigliosi. Este incidente revive cuestionamientos sobre las tácticas clientelistas del partido, que históricamente ha recurrido a dádivas y movilización de recursos para captar apoyo electoral, como se denunció en el caso Cócteles por presunto lavado de activos.
El uso de bienes públicos en el lanzamiento de Fujimori refuerza la percepción de un populismo que apela a promesas de mano dura y beneficios directos, mientras se vale de estructuras estatales para fines partidarios. Aunque Fuerza Popular niega responsabilidad directa y atribuye el hecho a una «falta individual» de Luza, las evidencias de su vínculo con el partido y la falta de supervisión en la Mesa Directiva fujimorista alimentan el escepticismo. Con Fujimori empatada en un ínfimo segundo lugar (7% según Ipsos, octubre 2025), este escándalo podría complicar su estrategia en un contexto electoral competitivo, donde la transparencia y la ética pública ganan relevancia.